23 octubre 2008

FELIZ CUMPLE CHARLY




Podría sentarme a escribir miles y miles de cosas sobre Charly García, pero no: sobre él ya escribí mucho y hoy sólo quiero homenajearlo no por cumplir años, sino por cumplirlos en una nueva etapa de su vida.
Hace varios meses "rezábamos por él", para que se mejore y salga de una crisis que parecía ser el final. Hoy Charly cumple 57 años y los cumple recuperándose junto a los que más lo quieren. Y lo que más contenta me pone es que haya bajado a tierra para que los que lo queremos sigamos disfrutando la excelente música que sólo él nos puede dar.
Para que vuelva con la fuerza de Piano Bar, las música de La Hija de la Lágrima, la energía de Demasiado Ego y sobretodo, El Agunate de siempre...
...Fuerza Charly, y feliz cumple!

26 agosto 2008

Rezo por vos




HOY A LAS 21 HS CADENA PARA DARLE FUERZA A CHARLY!!!!

SOLO TENES QUE PONER UN TEMA A TODO DE ÉL A TODO VOLUMEN

DESPUÉS DE TANTA, TANTA, TANTA MÚSICA, SE LO MERECE...

08 agosto 2008

Porque yo lo digo!!

Solo porque hace mucho no se postea nada... Y porque yo digo que Serú es la mejor banda de la historia de nuestro rock, y que La Canción de Alicia en el País es, si no la mejor de todo el repertorio nacional, una de las mejores seguro...Va este video



Y de yapa este link, con Moro contando el tema de las letras en Serú...

05 julio 2008

Andrés Calamaro



Andrés Calamaro (22/08/61) aprendió a tocar el bandoneón a los 8 años y a los 17 ya tocaba los teclados en el grupo de candombe-rock Raíces, con quienes debutó discográficamente. Tras un fugaz paso por la Elmer Band, se incorporó a Los Abuelos de la Nada, la agrupación de Miguel Abuelo que grabó cinco discos entre 1982 y 1986. Compuso dos de los hits más destacados de la banda: "Mil horas" y "Sin gamulán".

Paralelamente a sus actividades "oficiales", Calamaro integró infinidad de grupos, siempre en calidad de invitado. Participó en La Ray Milliand Band (con Pipo «Látex» Cipolatti, Daniel Melingo, Miguel Zavalata, Hilda Lizarazu y Fabián Von Quintiero), Los Zodíaco y Comida China (con Rafael Bini, Tom Lupo, Chiche Alberti, Willy Crook, Fabián Von Quintiero, Miguel Zabaleta, Hilda Lizarazu, Fabiana Cantilo y Rinaldo Raffanelli).

En 1984 hizo su debut solista, con "Hotel Calamaro". La producción de algunos temas estuvo a cargo de Charly García y Fito Páez participó de algunas sesiones, ya que estaba grabando su LP "Del '63" en el mismo estudio. Duramente criticado por la prensa, este disco fue casi ignorado por el público. Sin embargo, con el tiempo, sobrevivieron "Fabio Zerpa tiene razón" y "Otro amor en Avellaneda".

En 1985 integró Las Ligas, la banda que acompañaba a Charly García y registró "Vida cruel", con Fernando Samalea (batería) , Richard Coleman y Gringui Herrera (guitarras), Fabián Von Quintiero (teclados) y el Flaco Spinetta como invitado. Su tercer disco solista, "Por mirarte" (1987) no tuvo demasiada repercusión, aunque se destacan el tema homónimo y el cover de "Johnny B. Goode", el clásico rock and roll de Chuck Berry.

Mismo destino sufrió el cuarto álbum, "Nadie sale vivo de aquí" (1989), pese a la buena crítica de los medios. Ya por entonces tenía una banda estable: Ariel Rot (guitarra), Gringui Herrera (guitarra), El Alemán Schanzenbach (bajo), Ricardo González (batería) y Jordi Polanuer (saxo). Previamente había trabajado en la producción de los discos de Don Cornelio y la Zona, Los Enanitos Verdes y Los Fabulosos Cadillacs.

En septiembre de 1991 emigró a España, en donde fundó la banda Los Rodríguez, junto a Ariel Rot, Julián Infante y Germán Vilella. Con este grupo hispanoargentino grabó cuatro placas y consiguió mayor éxito con "Sin Documentos" (1993).




Paralelamente, continuó con su carrera solista: "Grabaciones encontradas" ("Volumen 1" en 1993 y "Volumen 2" en el '94), presentadas en The Roxy junto a Gringui Herrera y Willy Crook, más los invitados especiales: su hermano Javier, Charly García, Mariano Mores. En esta placa se incluye uno de los hits más importantes del verano '94: "No se puede vivir del amor".

En 1995 compuso la banda de sonido de dos películas nacionales: "Caballos salvajes" (segundo trabajo de Marcelo Piñeyro tras su popular "Tango Feroz") y "1000 boomerangs" (opera prima de Mariano Galperín).

Participó del álbum "Chiapas", a beneficio de los indígenas de ese estado mexicano, para el cual grabó el tema "Media Verónica" y regresó a los discos solista con "Alta Suciedad" (1997).

La hiperproductividad habitual de Calamaro se plasmó en el 2000 con su disco quíntuple "El salmón" (del cual por cuestiones comerciales también se editó un highlight).

Varios años de silencio pasaron antes de su siguiente disco. Calamaro publicó varios temas inéditos y out-takes en internet, pese a la presión de la industria discográfica en contra del mp3. Pero en el 2004 se despachó con "El cantante", un disco casi acústico de canciones clásicas del repertorio latinoamericano y tres canciones propias.

04 julio 2008

SKAY BEILISON



A los 12, Skay era Eduardo Beilinson. Un niño que llegaba corriendo a su casa desde el colegio y sintonizaba Radio El Espectador, de Montevideo, que se escuchaba perfectamente en La Plata. El programa se llamaba Beatlemanía y pasaba los temas del grupo que marcó el comienzo de la “gran revolución generacional” (Skay dixit). El pequeño Eduardo se enamoró de ese sonido. Estaba terminando la escuela primaria y años antes había aprendido algunas zambas en la guitarra. Pero cuando descubrió los tres acordes de “Twist & Shout” armó un grupo, The Longfellows, con un repertorio basado en los Fab 4 y los Byrds.
El alumno Beilinson se apasionaba con la música y no era afecto a la lectura. Sin embargo, durante el secundario nunca se llevó una materia. Había construido su primera guitarra eléctrica (“el cable que no tenía plug y era una rosca (risas); los que sepan de guitarras sabrán de que hablo”, dice). No era de jugar al fútbol, ni hacía ningún otro deporte. Prefería ratearse del Liceo Víctor Mercante a jugar al billar en tugurios llenos de humo. Algo sabía sobre la explosión del hippismo en el mundo. Pero ni siquiera sospechaba el rumbo que iba a tomar su vida.

En 1967, yendo a Sudáfrica en barco con sus padres, ganó un concurso tocando la guitarra. El premio era un pasaje a Europa, que un año más tarde se transformó en un viaje iniciático junto a su hermano Guillermo. A fines del 68 llegaron al Barrio Latino de París, y participaron de varias revueltas estudiantiles (resabios del emblemático Mayo francés), hasta que de alli se fueron a Londres ("En realidad de Francia nos deportaron. En una revuelta la policía me metió un palazo en la cabeza. Estuve en cana y después nos echaron. Y bueno, fuimos a Londres". “El Che Guevara estaba en las pancartas, y ser sudamericano era peligroso”, recuerda).
Allí se encontraron con su otro hermano, Daniel. Se maravillaron con la explosión del hippismo y vieron un show de Jimi Hendrix en el Albert Hall.

En Londres, Skay recibió un llamado de sus padres, preocupados por el nuevo rumbo que había tomado la vida del joven Eduardo. Negoció, entonces, su regreso a la Argentina. Trajo un amplificador Marshall, una guitarra Grestch, un wah wah y un distorsionador. Volvió a La Plata cargado de discos de Hendrix, Cream, Pink Floyd y Vanilla Fudge. Su concepción del mundo y de la vida ya era diferente. Dejó el colegio, abandonó- para siempre- la seguridad burguesa y la contención de su familia de clase media acomodada y partió a la aventura. Conoció a Poli y, junto a ella, su hermano Guillermo y una comunidad ambulante de delirantes inició un periplo que lo llevó a vivir en: a) un terreno baldío en la ciudad de las diagonales; b) un campo en Pihué, donde intentó vivir de la caza con arco y flecha; c) una casita en Tolosa; d) la selva salteña, y e) San Rafael, Mendoza. Además, se hizo amigo de los miembros de la Cofradía de
la Flor Solar, un grupo hippie de La Plata que contaba entre sus miembros al maestro Rocambole-responsable de la imagen gráfica de Los Redondos y, también, del nuevo proyecto de Skay-y músicos como Kubero Díaz, Morcy Requena y Manija Paz. Formó el grupo Diplodocum Red & Brown (llegó a grabar un simple en 1970) y visitó, en ocasionales paseos por Buenos Aires, el Instituto Di Tella.

Skay Beilinson se cruzó con Carmen "Poli" Castro en 1969 (5 de noviembre de 1969) luego de un concierto conjunto que dieron Diplodocum y La Cofradía de la Flor Solar en el Opera de La Plata. Integraban la poderosa vanguardia hippie platense. Skay ya tenía cierta experiencia política-lisérgica por sus experiencias por Europa. Poli era estudiante de teatro y aquel día del 69 estaba haciendo la obra "300 millones", de Roberto Arlt.
A él todavía nadie le decía Skay: (lo bautizaría poco después, cuenta la leyenda, Marta Minujín en el Instituto Di Tella: "tenes los ojos azules como el cielo" dijo). Ella tampoco era "La Negra Poli".

"Yo tenía la cabeza en llamas -dice Skay-. Volví de Europa con un amplificador Marshall, un pedal de distorsión y uno de wah-wah. Después de Diplodocum me acerqué a La Cofradía, donde llegué a grabar. También formé un trío acústico con Morci Requena y Kubero Díaz. Eramos hippies, vivíamos en comunidad, creíamos en una nueva vida y en un nuevo hombre. Cuando conocí a Poli todo me cerró aún más." Agrega Poli: "Nos fuimos a vivir en comunidad a la Isla Paulina, cerca de Berisso. También estuvimos en Sierra de la Ventana, en Tolosa... Por 1974, 1975 aparece el Indio con Guillermo, el hermano de Skay."

Ese fue el germen de los Redonditos. Skay y el Indio empezaron a componer canciones como Mariposa Pontiac y Un tal Brigitte Bardot. Políticamente la Argentina se estaba oscureciendo: algunos integrantes de las diferentes comunidades hippies o de círculos intelectuales empiezan a ser perseguidos. En 1976 hay allanamientos y desaparecidos. Hay una diáspora y un concierto mítico en la ciudad de Salta. Nacen los Redonditos con un aura misteriosa. Mucho antes de convertirse en la banda de rock más grande de la Argentina, el grupo buscó exorcizar los dolores de la dictadura con performances subterráneas donde se mezclaban estéticas de cabaret, vodevil, rock, teatro y plástica.
Eduardo Skay Beilinson


Guitarrista de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, Skay editó su primer disco solista en el 2002, acompañado por Daniel Colombres en batería y Claudio Cuartero en bajo, con producción de la Negra Poly. "A través del Mar de los Sargazos" está conformado por canciones que fueron quedando afuera de los discos de los Redondos. «Son ideas muy ricas que, cuando las escuché, me seguían estimulando».

Con Colombres, Cuartero, Oscar Reyna (guitarra) y Javier Lecumberry (teclados) avanzó sobre "Talismán" (2004), una placa de once temas de su autoría y un track, "Boggart Blues", compuesto a dúo con Claudio Kleiman. En "Presagio" participa la cantante lírica Eva Faludi.

Si bien el mito del eterno retorno de Los Redondos estuvo siempre presente, en cada oportunidad que se lo consultó al respecto Skay fue directo: "no me interesa hacerlo por la plata. Si alguna vez ocurre el regreso de Patricio Rey, tendrá que ser con disco nuevo". En 2007 editó "La marca de Caín", una placa con más acento en las guitarras que los anteriores. Con el nombre de Los Seguidores de la Diosa Kali, su banda estaba integrada por Lecumberry (teclados), Claudio Quartero (bajo), Topo Espíndola (batería) y Reyna (guitarra).


Cuando ya me empiece a quedar ¿Solo?


Profético. Esa palabra ha caracterizado a Charly García durante toda su carrera musical, desde aquel Sui Géneris que denunciaba el doble discurso de la moral argentina hasta un Serú Girán que, a su manera, contaba lo que ocurría en nuestro país durante su época más oscura. Charly siempre puso al alcance de nuestras manos letras profundas que parecían adelantarse en el transcurso del tiempo. Letras que para muchos, tuvieron sentido años después (El mismo Oscar Moro comentó cierta vez que entendió el sentido de la Canción de Alicia en el País mucho tiempo después de Serú).

Parece ser que Charly también le pegó con el tema "cuando ya me empieze a quedar solo"

Tendré los ojos muy lejos/y un cigarrillo en la boca/el pecho dentro de un hueco
Un escenario vacío/un libro muerto de pena/un dibujo destruído/y la caridad ajena
Un rumor de voces que me gritan/y un millón de manos que me aplauden/y el fantasma tuyo, sobretodo/cuando ya me empiece a quedar solo


¿Es o no es esta letra una especie de antología? Escrita en el año 1977 -todavía en la época de Sui- es la profesía de su destino.
Si bien Charly es un gran artista (es más, el único con oído absoluto, don con el que nace una persona por cada millón) hoy por hoy se encuentra en la máxima expresión de decadencia: en su casa no tiene cable ni teléfono, ni siquiera un sillón. La puerta principal no tiene llaves porque se perdieron. La vida de Charly ha sido una vida de excesos, marcada por el escándalo y las drogas. El mismo diría que no hay nada más importante en la vida que el "sexo, las drogas y el rock and roll". Quienes lo admiran están; pero como dice él: "No conozco a nadie y todos saben de mi"

El que no es fanático de su música, lo conoce únicamente por los escándalos: que se tire de un noveno piso, que le pegue a un fotógrafo o que suspendan sus shows porque él no llega, y si llega, rompa todo.



Ahora bien, mientras Charly estuvo en la cúspide, nadie habló de su "locura", nadie se preocupó porque estuviera desbarráncandose irremediablemente. Mientras vendía más discos que nadie (porque ahora las discográficas no lo contratan), llenaba estadios y vivía la "opulencia típica del rock", todo estaba bien: estaba bien que se drogue hasta caer inconciente, estaba bien que suspenda shows ("al fin y al cabo es un artista"), básicamente, sus excesos estaban bien.

Pero, se sabe, estas cosas no son eternas: su cuerpo le pasó facturas, los amigos se borraron y la gente que alguna vez quiso ayudarlo ya ni se le acerca, tan desgastada quedó la relación. Es por eso que es preocupante ver a Charly hoy, prácticamente solo, internado en un psiquiátrico, donde no lo visitan más que su hijo y dos amigos. Es muy triste ver que un ídolo - el ídolo- del rock nacional no sea capaz de encaminarse.
En vez de enfocarns en sus escándalos y "obsenidades", deberíamos enfocarnos en que si está en la decadencia, eso no es producto de "su" locura únicamente.

Sin embargo, algunos se mantienen fieles, y quieren ver a Charly largarse al ruedo otra vez, acá les paso el link de una nota de la Rolling Stone para que vean que aunque son muy pocos, Charly todavía tiene un par de aliados.

01 julio 2008

Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota


Formación inicial
Carlos "Indio" Solari: voz
Daniel "Semilla" Bucciarelli: bajo
Eduardo Skay Beilinson: guitarra
Piojo Abalos: batería
Tito Fargo D'Aviero: guitarra
Willy Crook: saxo


Esta banda tiene origen en La Plata, en 1976. Descendiente directa de La Cofradía de la Flor Solar, en un principio no tenía ni nombre ni integrantes fijos, sino que alrededor de 15 músicos se alternaban en los instrumentos. Los tres pilares fundamentales son: el Indio Solari (voz), Skay Beilinson (guitarra) y Carmen Castro 'La Negra Poly" (manager y alma mater), a quienes se podría agregar Ricardo Cohen, "Rocambole", algo así como el director artístico de la agrupación. Skay había integrado Diplodocum, junto a su hermano Guillermo Beilinson, Topo D'Aloisio, Isa Portugheis y Bernardo Rubaja.
Si bien la música siempre formó parte esencial de los shows de Patricio Rey, en las primeras presentaciones en teatros de La Plata se ponían en escena números de teatro y ballet, mientras se repartían verdaderos redonditos de ricota entre el público.
Ya para el '78 se presentan en teatros under de la Capital. Entre 1979 y 1980 la banda se distancia: Skay y Poly se mudan a Mar del Plata y el Indio a Valeria del Mar. Como la costumbre lo indica, a fines de año se reunían para tocar juntos.



En 1981 retomaron el rumbo de los pubs, para llegar a grabar su primer demo profesional, en 1982: "Nene, nena", "Mariposa Pontiac", "Superlógico" y "Pura suerte" fueron los temas registrados en RCA, que logran una importante difusión en las FM porteñas. Para ese entonces también se habían unido a la banda las coristas Bay Bisquits (Vivi Tellas, Fabiana Cantilo e Isabel de Sebastián). También participaba el periodista Enrique Symms, recitando y monologando en la introducción del espectáculo.
La periodista Gloria Guerrero publicaba allá por diciembre de 1982: «Una es imparcial, trata de no tomar partido por nadie, pero a veces es imposible. El grupo que más me interesó en los últimos tiempos hace un recital y quiero que lo sepan. Y además porque es muy difícil que se enteren por otro medio, ya que estos delirantes tipejos no publicitan un cuerno nada de lo que hacen. Las noticias "se corren" y los teatros se llenan» (G.Guerrero en Humor, diciembre 1982).
En diciembre de 1984 grabaron "Gulp", la primera placa, en los estudios de MIA, con Lito Vitale como operador y músico invitado. La plata para esta producción independiente provino de un pozo común formado por un porcentaje de las ganancias de cada show. La distribución comercial corrió por cuenta de la Negra Poly. «Si un productor quiere ocuparse de Patricio Rey en grabaciones, o en lo que sea, está invirtiendo una cantidad. Y para resarcirse de lo que invirtió deberá vender a Patricio Rey de alguna manera que no tiene absolutamente nada que ver con lo que Patricio Rey quiere hacer» (Poly, en G.Guerrero pág 80). Más adelante firmarían un contrato con la Distriubuidora Belgrano. A casi 8 años de su nacimiento, Los Redondos comenzaban a ser conocidos masivamente, con temas como "Barbazul versus el amor letal", "La bestia pop" o "Ñam fri fruli fali fru".
"Oktubre" (1986), la segunda placa, termina de lanzarlos a la masividad. La prensa especializada coincide: "es un discazo que de entrada obliga a adjetivar desmedidamente", publica la revista CantaRock. Los hits más importantes son "Semen-Up" y "Fuegos de octubre".
A comienzos de 1988, Walter Sidotti reemplaza a Avalos en la batería. También se aleja D'Aviero. En noviembre, el que emigra es Crook (se une a Los Abuelos de la Nada) y su lugar lo ocupa Sergio Dawi. Por entonces, los Redondos eran elogiados casi devotamente.
"Un baión para el ojo idiota" es el título del tercer disco (1988), "el que refleja más fielmente el sonido del grupo", según el Indio y que contiene una canción emblemática para ellos y su público, "Vamos las bandas".
"Esa estrella era mi lujo", "La pabellum de un psicópata" y "Héroe del whisky" son los temas que sobresalen del siguiente LP, "¡Bang! ¡Bang! ¡Estás liquidado!" (1989). El 29 de diciembre de 1989, diez días después de llenar dos Obras, se presentan en el campo de hockey del mismo club, ante 25.000 fans, cifra inédita hasta entonces para ellos. El año '90 transcurrió con constantes presentaciones en discotecas y en el estadio Obras Sanitarias. Esto modificó en parte la relación entre la banda y su público. Muchos consideraron que presentarse en Obras consistía en una "traición" a los principios siempre enarbolados de no transar.
En abril de 1991 vuelven a presentarse en Obras. La Policía detiene a unas 40 personas, entre las que se encuentra Walter Bulacio, quien tras pasar horas encerrado en un calabozo y 5 días en coma, muere en medio de declaraciones contradictorias. La carátula pasa de "muerte por lesiones graves" a "muerte dudosa", pero los culpables no aparecen, pese a las marchas de repudio. Desde ese entonces, un nuevo cantito es incorporado por el público: "Yo sabía, yo sabía, a Bulacio lo mató la Policía".
Para fines de ese año, Patricio Rey se vuelve a presentar en Obras con su nueva placa: "La mosca y la sopa" (1991), que tiene en
"Mi perro dinamita" y "Un poco de amor francés" a sus temas más importantes.
El disco en vivo "En directo" (1992) es una especie de "pirata oficial" según el mismo Skay. Incluye grabaciones de shows minuciosamente seleccionadas y remasterizadas en Estados Unidos.
La popularidad de la banda se confirma una vez más en dos presentaciones en el Centro Municipal de Exposiciones, donde estrenan temas nuevos ante 40 mil personas. Patricio Rey se decide entonces a lanzar un disco doble con 25 temas, titulado "Lobo suelto" / "Cordero atado" (1993). Por primera vez en su carrera, los Redondos se animan a un estadio de futbol: dos noches consecutivas en Huracán, con 80.000 espectadores en total, dan prueba de la aceptación del disco.
Tars largos meses de silencio, se anunció una presentación en la ciudad santafecina de San Carlos, en agosto del '95. Para la fecha del show, la capacidad hotelera había sido totalmente saturada y hordas de fanáticos se instalaban en carpas en las afueras de la ciudad. Realizaron dos shows en una discoteca con capacidad para 3000 personas que fue totalmente colmada.
Hacia fines de diciembre de 1998, los Redondos se presentaron en el estadio de Racing, para la presentación del "Ultimo bondi a Finisterre", el noveno disco. Dos shows con más de 45.000 personas en cada uno cerraron un año con Patricio Rey muy cerca de la Capital Federal, como hacía mucho tiempo que no se podía gozar.
Ese esperado show en pleno Buenos Aires tuvo lugar finalmente los días 15 y 16 de abril del 2000 en River. Con algunos incidentes en las inmediaciones del estadio, alrededor de 140.000 fanáticos participaron de un hecho calificado por la prensa de "histórico".
Un año después, Los Redondos se presentaron en el Estadio Centenario de Montevideo, el primero de la banda fuera de Argentina.
Al show le siguieron varios meses de silencio, hasta que finalmente, Skay y la Negra Poly anunciaron que "al menos por un tiempo", Patricio Rey permanecería en silencio. Luego, Skay anunció el lanzamiento de su primer disco solista, llamado "A través del mar de los Sargazos" y el mismo camino siguió el Indio.

26 junio 2008

Pappo y BB King

Otra joyita de You Tube para el deleite de los fans del buen rock.

Hoy, Pappo, gran refrente de la movida rockera nacional -y porque no, el Jimmy Hendrix argentino- tocando blues con uno de sus ídolos: otro grande, BB King. Porque Pappo no fue sólo heavy metal, era un fanático del blues y tocar en el Madison Square Garden con King fue, según el mismo, algo que nunca iba a olvidar...
Escuchen los solos de Pappo, guitarristas así, no llegan muy de seguido.


25 junio 2008

Tres grandes juntos

Acá les dejo otro videíto de tres gandes del rock tocando juntos, pueden ver a Gustavo Cerati, Charly García y Fito Páez tocando "Ciudad de pobres Corazones", uno de los mejores temas del rosarino -ese CD fue electo el mejor del año- inspirado en el asesinato de sus tías y su abuela durante un robo.

Para los fanáticos de Fito, les dejo una buena página para visitar: www.euforia-paez.com.ar

23 junio 2008

Serú Girán: Una verdadera máquina del rock

Pocas veces se ha visto lo que se dio con con Serú Girán, que fue una especie de los cuatro fantásticos del rock: buenas letras y excelente música, voces armoniosas...La sofisticación de La Máquina de Hacer Pájaros, pero con un sonido con otro relax y también otra inmediatez, algo que ver quizás con la peculiar sinergia de un cuarteto con tres polos de creatividad que aportan en diferentes proporciones y que conjugan sus visiones individuales en una sola: es allí donde Serú brilla con luz propia.

Acá les dejo una joyita de video de Serú Girán, que es para mí la mejor banda de la historia del rock nacioal: sus letras son fantásticas, están llenas de metáforas que representaban bien la situación política y social que atravesaba nuestro páis en aquellas épocas. Presten atención a la letra de "Cinema Verité"...

21 junio 2008

Luca Prodan opina sobre el rock nacional

Siguiendo con las opiniones sobre el rock nacional y los artistas que los conformaron, presentamos al cantante de Sumo en una nota imperdible en la cual opina sobre varios artistas del rock nacional con su particular y única mirada.
Que lo disfruten...

¡El tiempo pasa, nos vamos poniendo tecnos!



Tras cumplirse 40 años de nuestro rock, este se convirtió en la música más representativa y popular de nuestro país. Con el correr de los años, década tras década, muchos fueron los cambios, en todos los ámbitos: político, económico, socio-cultural, incluyendo transformaciones en lo musical. Hoy, el género del rock se ha desvirtuado mucho. Tal vaz esto se deba a varios factores, que habría que analizarlos con más profundidad. Pero lo cierto es que, hoy en día, cualquiera que aparezca en MTV ó "La Rolling Stone!, lo caratulan de "rockero".

Uno de los cambios que se aprecian facilmente, está en los discursos (poesía, filosofía, letras) de los artistas, y tal vez es uno de los cambios más importantes. En las viejas épocas del rock, sin bien eran épocas muy jodidas, los valores, los ideales, eran otros. Se buscaba construír un "nosotros", algo colectivo, hacer sentir a la ge
nte que no estaban solos, qye había otras personas que pensaban y sentían como ellos, y que valía la pena luchar por esos ideales (libertad, paz, amor, naturaleza, etc.)






El período 76-77 estuvo caracterizado por un t
remendo auge de los recitales de rock nacional. Uno, y hasta dos Luna Parks llenos por mes, eran comunes en esta etapa, además de los innumerables conciertos en teatros y café concert. No obstante, no es período donde pueda apreciarse un incremento en la venta de discos del género, dado que lo que se estaba procesando era una necesidad social y no una cuestión estética y comercial.

"Ir a un recital era como una necesidad. No dejábamos pasar ninguno. Había una necesidad tremenda de estar juntos...de participar en algo y a la vez estar seguro" (Ricardo, empleado bancario, 31 años).

"Era una época en la que gastabas mas guita en recitales que en discos. ¡Gastabas mucha más guita! Pero es la época en que se empezo a escuchar discos en común. A nosotros, por ejemplo, en esa época se no ocurrió juntarlos entre 10 o 15 tipos. Hicimos una discoteca gigante y escuchabamos discos entre todos. O sea que teníamos todo colectivo ¿viste? Es que la música la vivíamos como
algo colectivo ...(Carlos, empleado, 30 años)

Ir a recitales y escuchar discos en grupo de amigos se convertían en actividades privilegiadas para un movimiento que intentaba salvaguardar su identidad, al mismo tiempo que la identidad de todo un grupo etario.


En la década de los 80, con el arribo de la democracia, se vislumbraba claramente en las propuestas de los músicos, las inseguridades por el camino a seguir. Las opciones iban desde la planteada por
Spinetta (seguir siendo reducto de lo incorruptible) hasta lo planteado por Los Abuelos de la Nada: divertir. En el medio eran muchas las variantes: transformar el movimiento en algo más que un público que asiste a recitales, creando "Centros de las buenas ondas" que realizaban acciones comunitarias (Piero); seguir contra el sistema (Pappo) o reinsertar al movimiento del underground, como única alternativa para evitar la comercialización creciente (Miguel Zavaleta).

La falta de una propuesta unitaria hace aparecer a los ojos del movimiento esta etapa como crítica. Los intentos renovadores de los "viejos líderes", muchos veces son incomprendidos, y el período se caracteriza por la caída de varios ídolos sin el surgimiento de otros que los reemplacen.

"Creo que hay demasiado drama en el rock...Pienso que hay que devolverle al rock la cuota de esparcimiento que antes tenía. Sería bueno que el rock incitara algo, a bailar, a cantar, y no solo a compadecerse de los pobres que sufren en este país"
(Charly García, Revista Pelo, Julio 1983)

Hoy, todo es muy distinto. El mercado, la globalización, así también como muchos músicos, lo único que anhelan son ganancias. Esto se ve claramente en las composiciones de los discos, salen uno tras otro, sin importar la calidad de su contenido. Los viejos valores de la música parecen haberse perdido con el paso del tiempo. La importancia de construír algo colectivo, en defensa de ideales étnico-culturales, se reemplazaron por el individualismo y las ansias de ve
nder millones de discos, aparecer en tapas de revistas, conquistar el primer puesto de un ranking en la Tv o en la radio.

La diferencia que vemos en artistas como, para dar algunos ejemplos, Luis Alberto Spinetta,
Charly García, Gustavo Cerati, Fito Páez. Estos se toman varios años para componer sus discos, y luego, en el producto terminado, notamos gran calidad musical, y en sus letras. Es por esto que trasgreden en el tiempo, son tan elogiados, respetados, y populares, así como fueron y siguen siendo las grandes influencias de cientos de músicos, en la Argentina ocmo en Latinoamérica.

El movimiento del rock nacional ha desempeñado un papel sumamente importante en la socialización y resocialización de amplios sectores de la juventud argentina, a lo largo de estos 40 años, restaurando la comunicación veraz acerca del país real, rescatando el sentido de la vida, consolidando un actor colectivo como forma de contrarestar un modelo de vida indiviudalista y capitalista, contraponiendo la solidaridad a los intereses del mercado y a la transformación global de los actores colectivos en la argentina, ect.

Sería bueno que muchos de los músicos contemporáneos, así también como los jóvenes de esta sociedad, se tomen un instante de reflexión, miren hacia el pasado y podamos rescatar, entre todos, esos valores, ideales y esa música tan preciosa, que nuestros más grandes líderes/ídolos nos han dejado en herencia.